Comunicado de prensa: Tragedia en Tamaulipas

Promoviendo la presencia Pastoral de la Iglesia en la vida de los Migrantes y quienes los acogen” 

México, D.F., 25 de agosto de 2010

EXTERNAMOS NUESTRO DOLOR E INDIGNACIÓN POR LA MUERTE DE NUESTROS HERMANOS/AS MIGRANTES EN SAN FERNANDO, TAMAULIPAS

Hacemos un llamado urgente a nuestras autoridades, locales, estatales y federales a una acción a favor de la persona humana, independientemente de su calidad migratoria.

Les exhortamos a que actúen con responsabilidad, legalidad y acciones concretas contra estas barbaries que han sido denunciadas desde hace más de cuatro años y sólo nos dejan ver como un país incontrolable e impune.

El Secuestro de las Personas migrantes nos duele y ha sido considerado a través de una audiencia
temática en la Comisión Interamericana de los, Derechos Humanos, que determinó los abusos que sufren los migrantes en México, como una tragedia humanitaria.

Incitamos a los criminales a una conversión de vida; pues han perdido el sentido de la misma y el dolor por los demás, asesinando a sus 72 hermanos/as migrantes en el rancho de San Fernando, Tamaulipas.

Les rogamos a los actores de este lamentable hecho, para que cese su ambición, su pérdida de conciencia y la violencia extrema cometida contra la población migrante; dejen de hacerse daño y hacer daño a una población tan sufrida como es, la migrante.

Hermanos y hermanas, los migrantes siguen siendo secuestrados y como consecuencia a las extorciones no pagadas, llegan a la muerte; no queremos seguir callando y haciendo caso omiso a lo que nuestros hermanos/as migrantes sufren; pues en ellos sigue muriendo el Señor Jesús, por ello seguimos insistiendo que se actúe con legalidad ante tanta inhumanidad.

Externamos nuestra solidaridad y condolencias a las familias de estos hermanos/as nuestras que con la esperanza de buscar una vida mejor, han encontrado la muerte de sus vidas y sueños; ansiamos que este México sea verdaderamente un mundo donde la civilización del amor, sea posible.

Dimensión Pastoral de Movilidad Humana